CARBÓN ACTIVO Y TÓXICOS:
El carbón activo empezaría a aplicarse en máscaras antigas durante la Primera Guerra del Golfo (1991). Años después, en noviembre de 1997, se produciría otro hito: el Departamento de Química Inorgánica de la Universidad de Alicante conseguía -a petición del Ministerio de Defensa español-, crear (y patentar) tela de carbón activo, aplicación útil para confeccionar trajes para el Ejército cara a una hipotética guerra química. El grupo investigador estuvo dirigido por el profesor Francisco Rodríguez Reinoso, que explicaba que el carbón activo: "originariamente (...) son pequeñas partículas en grano que proceden del hueso de la aceituna", y estas actúan "como filtro de cualquier gas peligroso de los que se producen en una guerra química".
OTRAS UTILIDADES DEL CARBÓN ACTIVO:
En esos años noventa ya se vislumbraron, además, otras aplicaciones para el carbón activo aparte de las militares: fundamentalmente aquellas en torno a la contaminación. En este sentido, las aplicaciones son múltiples: 1.- como purificadores de aparatos de aire acondicionado, 2.- como limpiadores de ambientes de museos y similares con el fin de conservar el patrimonio histórico, 3.- en procesos de descontaminación (ej.: el desastre ecológico chino de 2005, en donde las noticias hablaron de que "se lucha contrarreloj para conseguir 1.400 toneladas de carbón activado que ayude a depurar las aguas"), eliminación de olores, tratamientos de aguas potables y residuales, etc.. En este sentido, el carbón activado purifica gases, olores, aguas... lo que lo convierte en un producto con multitud de aplicaciones industriales.
Hoy día, además el carbón activo es el componente de los filtros incorporados a la altura de la boca de las mascarillas recomendadas a personas con intolerancia química múltiple, o lo que es lo mismo, con sensibilidad química múltiple, por parte de los médicos especialistas. También se usan mascarillas con carbón activo en el entorno de salud laboral para trabajos en que se precisa protección de este tipo.
Es curioso que las aplicaciones del carbón activado como muchos otros inventos nacieran a partir de "necesidades" militares y no sociales, para luego trasvasarlas (y comercializarlas) al público civil (caso del reloj del pulsera también).
CÓMO ACTÚA EL CARBÓN ACTIVO:
El carbón activo actúa reteniendo los gases tóxicos y convirtiéndolos mediante un tratamiento especial en otros elementos no perjudiciales (nitrógeno, dióxido de carbono -CO2-).
CARBÓN ACTIVO Y SENSIBILIDAD QUÍMICA MÚLTIPLE:
Tras la aparición en 1997 de la noticia que da pie a este post (la consecución de tela a partir de carbón activo por parte de un equipo de investigadores españoles), no se volvió a tener noticias sobre qué evolución tomó el tema.
En este sentido sería interesante para las personas con SQM una indumentaria de calle con tela de carbón activo (es más difícil que los gobernantes de este Planeta se pongan de acuerdo para hacer de él un mundo más saludable que el crear algo así). Si ya existe una ropa confeccionada con tejidos que según les de más o menos luz o según tenga mayor o menos temperatura corporal cambia de color, ¿por qué no una ropa de sport de carbón activo?.
UN CURIOSIDAD:
Junto a la misma noticia de la tela de carbón activo apareció otra sólo reseñada brevemente: el de la investigación (también en los 90) de una bacteria que manipulada genéticamente tardaba pocos días (lo mismo ahora, en 2007 es cuestión de segundos) en devorar el 85% de una muestra de TNT. Y además de ingerir el producto, lo desactivaba.
Fue otra investigación con orígenes bélicos de la que tampoco se supo más pero que tiene un “parecido” sospechoso con “otra bacteria” de mecanismo de actuación similar pero con aplicaciones civiles y de cuya existencia se supo por emplearse en el desastre ecológico del Prestige ocurrido frente a las costas gallegas hace unos años: la bacteria “devora-petróleo”.
CONCLUSIÓN:
Mascarillas antigas, ropa de carbón activo para proveer al Ejército, invención de bacterias que comen TNT, otras que hacen lo propio con el petróleo,… y eso en un país no especialmente bélico y teniendo en cuenta que no todo sale a la luz, claro. No quiero ni pensar qué pueda estarse cociendo en los países por antonomasia más belicistas del planeta… Evidentemente estamos en la era de la amenaza químico-bacteriológica, pero no sólo amenaza bélica: la sociedad civil está expuesta ha multitud de componentes químicos y bacteriológicos en todas las esferas de su entorno (alimenticio, ambiental, ...).
Fuentes: Universidad de Alicante-noticias (pinchar aquí).
OTRAS UTILIDADES DEL CARBÓN ACTIVO:
En esos años noventa ya se vislumbraron, además, otras aplicaciones para el carbón activo aparte de las militares: fundamentalmente aquellas en torno a la contaminación. En este sentido, las aplicaciones son múltiples: 1.- como purificadores de aparatos de aire acondicionado, 2.- como limpiadores de ambientes de museos y similares con el fin de conservar el patrimonio histórico, 3.- en procesos de descontaminación (ej.: el desastre ecológico chino de 2005, en donde las noticias hablaron de que "se lucha contrarreloj para conseguir 1.400 toneladas de carbón activado que ayude a depurar las aguas"), eliminación de olores, tratamientos de aguas potables y residuales, etc.. En este sentido, el carbón activado purifica gases, olores, aguas... lo que lo convierte en un producto con multitud de aplicaciones industriales.
Hoy día, además el carbón activo es el componente de los filtros incorporados a la altura de la boca de las mascarillas recomendadas a personas con intolerancia química múltiple, o lo que es lo mismo, con sensibilidad química múltiple, por parte de los médicos especialistas. También se usan mascarillas con carbón activo en el entorno de salud laboral para trabajos en que se precisa protección de este tipo.
Es curioso que las aplicaciones del carbón activado como muchos otros inventos nacieran a partir de "necesidades" militares y no sociales, para luego trasvasarlas (y comercializarlas) al público civil (caso del reloj del pulsera también).
CÓMO ACTÚA EL CARBÓN ACTIVO:
El carbón activo actúa reteniendo los gases tóxicos y convirtiéndolos mediante un tratamiento especial en otros elementos no perjudiciales (nitrógeno, dióxido de carbono -CO2-).
CARBÓN ACTIVO Y SENSIBILIDAD QUÍMICA MÚLTIPLE:
Tras la aparición en 1997 de la noticia que da pie a este post (la consecución de tela a partir de carbón activo por parte de un equipo de investigadores españoles), no se volvió a tener noticias sobre qué evolución tomó el tema.
En este sentido sería interesante para las personas con SQM una indumentaria de calle con tela de carbón activo (es más difícil que los gobernantes de este Planeta se pongan de acuerdo para hacer de él un mundo más saludable que el crear algo así). Si ya existe una ropa confeccionada con tejidos que según les de más o menos luz o según tenga mayor o menos temperatura corporal cambia de color, ¿por qué no una ropa de sport de carbón activo?.
UN CURIOSIDAD:
Junto a la misma noticia de la tela de carbón activo apareció otra sólo reseñada brevemente: el de la investigación (también en los 90) de una bacteria que manipulada genéticamente tardaba pocos días (lo mismo ahora, en 2007 es cuestión de segundos) en devorar el 85% de una muestra de TNT. Y además de ingerir el producto, lo desactivaba.
Fue otra investigación con orígenes bélicos de la que tampoco se supo más pero que tiene un “parecido” sospechoso con “otra bacteria” de mecanismo de actuación similar pero con aplicaciones civiles y de cuya existencia se supo por emplearse en el desastre ecológico del Prestige ocurrido frente a las costas gallegas hace unos años: la bacteria “devora-petróleo”.
CONCLUSIÓN:
Mascarillas antigas, ropa de carbón activo para proveer al Ejército, invención de bacterias que comen TNT, otras que hacen lo propio con el petróleo,… y eso en un país no especialmente bélico y teniendo en cuenta que no todo sale a la luz, claro. No quiero ni pensar qué pueda estarse cociendo en los países por antonomasia más belicistas del planeta… Evidentemente estamos en la era de la amenaza químico-bacteriológica, pero no sólo amenaza bélica: la sociedad civil está expuesta ha multitud de componentes químicos y bacteriológicos en todas las esferas de su entorno (alimenticio, ambiental, ...).
Fuentes: Universidad de Alicante-noticias (pinchar aquí).
Hola Maria Jose yo soy alérgica al latex, al caucho natural y estoy usando ya con frecuencia una mascarilla de papel,de las que usan en Hospitales con cintas en quirófano normalmente.
ResponderEliminarNo se si existe otra alternativa o solución, las que he visto de carbón activo lleva goma o caucho, eso no tolero.
Un abrazo Maika
Luzblanca7, si lo que me comentas es sobre la base de que tienes SQM, las mascarillas “de papel” que dices, no te protegen (tienen otro uso, que no es de protegerte a ti, sino el de proteger de ti al paciente que se está operando). ¿Te hacen efecto…?.
ResponderEliminarDe lo que me preguntas, sé de personas con diferentes alergias o sensibilidades, que lo que hacen es, sobre la mascarilla prototipo de 3M “nuestra”, ponerle o quitarle cosas (sustituyéndolas), hasta ver que les va bien porque no reaccionan a ellas (por ej. sustituir las gomas, ponerse en la zona de contacto entre mascarilla y cara alguna tela ecológica fina, etc.). En ese sentido, en la columna de la derecha (apartado “Pacientes”) puedes ver un enlace sobre mascarillas de 3M para nosotros, con las fichas técnicas de cada una, donde se describen los materiales de los que se compone cada una.
Otra opción que no habría que desdeñarse es la de, en vez de usar mascarillas, hacerse una especie de braga o bragas con tela ecológica, que una o varias, las podamos poner en el cuello, y cuando nos lleguen olores, subirlas hacia nariz y boca, ajustándolas bien a las vías respiratorias (por ejemplo, ayudándose de una mano). Luego sería lavar estas telas, una vez se contaminaran, con nuestro detergente ecológico habitual (con el que no reaccionemos, ni deje olor), y guardar en un envase metálico hermético hasta su próximo uso.
Además, hay mascarillas confeccionadas con tela orgánica pero hay que comprarlas fuera y en tiendas online, por lo que si necesitas de forma habitual tenerlas a mano y que no sean muy caras, no sé si esta sería una solución práctica (ni si realmente te serían eficaces, o al menos “tan” eficaces como las de 3M, aunque tuvieras que adaptarlas a tus alergias específicas). En todo caso, te paso algún enlace por si quieres hojearlo, o incluso coger la idea de cómo son por si fuera manitas y quisieras probar a hacerte tú algunas, con las ideas que te he aportado antes sobre telas ecológicas:
Organic cotton mask (by I can breathe! Masks)
Espero que la información te sea útil!,
Hola yo también estoy enferma de lo mismo y tomo cápsulas de carbón activo cuando no puedo mas. Mejoro bastante son de arkocapsulas farmacia
ResponderEliminarGracias por informar de lo que te va bien al respecto, anónimo. Además del carbón activo ingerido que comentas, por si no lo conoces está también la opción (igualmente para desintoxicar), de ingerir vitamina C tras las exposiciones químicas, en caso de que la toleres.
ResponderEliminarLa puedes inferir como fruta o limones (naranjas, kiwis, etc.), en caso de que NO tengas intolerancias alimentarias a estas; o la puedes comprar en herbolarios y farmacias con diversas presentaciones:
-En polvo (que da más probabilidad de que sea vitamina C pura, o sea sin excipientes);
-En cápsulas; o
-En pastillas (en este último formato es donde suele haber más "añadidos" con el fin de "apelmazar" la pastilla y darle "sabor" azucarado u otros; además de excipientes tipo "lactosa").
En caso de que nos siente mal la “acidez” propia de la vitamina C, hay algunas casas (por ej. Solgar) que la venden “no ácida”, además de sin gluten, lactosa y otras cosas a los que se pueda ser intolerante aunque no se sepa y se confunda con que no se tolera el “producto”, cuando en realidad lo que no se tolera es algo que conforma sus excipientes, o el colorante que recubre la cápsula, o cualquier otra cosa ajena a los ingredientes base del producto).
Espero haber ampliado un poco vuestra información al respecto de las opciones para desintoxicarse tras una exposición.